La Paz de Israel

Escrito el 10/10/2023
Mario Gerardo Hernández Jiménez


En la mañana del 7 de octubre, a primera hora, recibí un mensaje de un amigo judío diciéndome: “Amigo, Israel está siendo atacado…” más tarde el Primer Ministro del Estado de Israel, Benjamin Netanyahu estaría declarando oficialmente que estaban en guerra. Esta noticia me estremeció bastante ya que amamos a Israel, pero sobre todo, por el entendimiento profético que esto significa. 

Sin duda estamos viviendo tiempos postreros y la sagrada escritura nos dice las características de estos tiempos. 

 

(Judas 1:18-19)

"Los que os decían: En el postrer tiempo habrá burladores, que andarán según sus malvados deseos. Estos son los que causan divisiones; los sensuales, que no tienen al Espíritu".

 

Este es el escenario que estamos viviendo, sin embargo también la escritura dice que en los postreros días sería derramado el Espíritu Santo sobre toda carne. Hch. 2:17 

 

¿Cómo puede suceder tal contraste? Por lo que dice el Apóstol Pablo: “Donde abundó el pecado, sobreabundó la Gracia” (Rom. 5:20) 

 

Estas escrituras nos mencionan los acontecimientos que sucederán en los postreros días y ya lo estamos viviendo; ha comenzado un derramamiento del Espíritu Santo en todo lugar donde se ha clamado por avivamiento, escuchamos noticias de lo que Dios está haciendo en la iglesia a través de milagros y manifestaciones sobrenaturales que nunca se habían visto y esto es el cumplimiento de lo que el Profeta Joel habló. (Joel 2:28)

 

Volviendo a los acontecimientos en Medio Oriente Jesús dijo en Mateo 24:6

"Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin".

 

¿Por qué no es el fin? Porque al “fin” le precede un poderoso avivamiento que llenará la tierra de su gloria por la predicación del evangelio y entonces sí vendrá el fin. 

 

Mateo 24:14

"Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin".

 

Aún no ha sido predicado el evangelio del Reino a toda criatura, ya que sólo un tercio de la población total a escuchado de la salvación Jesucristo, esto a pesar del crecimiento acelerado de la tecnología y la globalización de las comunicaciones. Aún falta un gran trabajo de llevar las buenas noticias al mundo. Un avivamiento del Espíritu hará posible que la tierra sea llena de su gloria. 

 

Oremos por La Paz de nuestros hermanos en Jerusalén que están padeciendo esta terrible guerra. 

 

Salmos 122:6-9

Pedid por la paz de Jerusalén;

Sean prosperados los que te aman.

Sea la paz dentro de tus muros,

Y el descanso dentro de tus palacios.

Por amor de mis hermanos y mis compañeros

Diré yo: La paz sea contigo.

Por amor a la casa de Jehová nuestro Dios

Buscaré tu bien.

 

Y tengamos paz en nuestro corazón ante la incertidumbre que vive el mundo y las noticias que escuchamos, aún no es el fin. 

 

Estos acontecimientos nos deben hacer reflexionar para tener un mayor compromiso con Dios y su Palabra, una mayor comunicación con el Espíritu Santo, y estar listos para cuando llegue el momento de partir o ser llevados por nuestro amado Jesucristo. ¡Te bendigo! 

 

Ps Daniel Sánchez.